Nos hemos adelantado, y vamos a hacerle ya nuestro particular homenaje a las madres. No olvides hacerlo tú este domingo.
Madres, ellas sí que son superheroínas y no las que aparecen en las películas. Los superpoderes de las madres son infinitos. Tienen el don de la predicción, de formular argumentos aplastantes, de los mensajes directos, de saberlo absolutamente todo, … y sobre todo el don de la puntería (la modalidad de tiro de zapatilla debería de estar presente en los juegos olímpicos).
¿Por qué todo lo hacen bien? Nos hemos parado a observar qué hacen las madres y, además de aprender cada día de ellas, nos hemos dado cuenta que saben mucho de marketing. Son capaces de hacer y acertar con más estrategias de marketing que muchas empresas. Y es que, realizar cada día el trabajo más difícil del mundo tenía que tener truco.
– He visto con quién sales últimamente. ¿Es que no prefieres salir con menganito o menganita?
Quizás no lo sabes, pero tienes un DAFO realizado por tu madre desde que empezaste a andar. Son capaces de segmentar a tu grupo de amigos en décimas de segundo y establecer cuáles de ellos son su público objetivo. Al colegio no sólo te acompañaban por velar por tu seguridad, es que ya de paso, realizaban un análisis de competencia.
Rentabilizan el dinero como nadie y estructuran su negocio (su familia) de la forma más óptima que hay.
– ¡Te lo dije!
Un mensaje corto, directo, capaz de dar sentido y englobar toda la comunicación de la marca. El ¡Te lo dije! está patentado por ellas y es que por mucho que les rebatamos siempre terminan llevando la razón.
Un slogan que lo mismo vale para un roto que para un descosido, siempre encaja.
– ¡Prepárate y verás!
Visto así, sin ningún condimento más, podría ser un mensaje que podría encajar en cualquier acción perteneciente a una súper campaña teaser. Pues ellas ya lo usan, aunque sus campañas de lanzamiento avecinan otro tipo de cosas.
– Mamá, mañana hay que ir a recoger las notas.
– Como traigas un suspenso, ¡prepárate y verás!
– Cuando yo tenía tu edad…
El “érase una vez” de una madre. Son generadoras imparables de contenidos, y de todo tipo. El storytelling les nace solo y lo hacen como nadie. Saben qué contar y cómo contarlo, atrayendo a su público objetivo y trasmitiéndoles los valores que desean.
– Mamá, ¿qué hay de comer?
– Comida
Poco más podemos añadir. Un mensaje corto y directo, que conecta con su target y tiene el efecto deseado: que te calles, dejes de preguntar y te comas lo que vaya a ponerse sobre la mesa sin replicar.
– Ya vendrás a mí cuando necesites algo
Detectan las necesidades antes de que ni tú mismo te des cuenta.
– Si estás enfermo para ir a clase, también lo estás para salir con los amigos. (Lógica aplastante)
– Abrígate que hace frío. (Su temperatura siempre es menor a la media)
– Bébete el zumo antes de que se le vayan las vitaminas.
Bueno, puede que aquí fallen un poco, pero es que si lo dice una madre está verificado, sea lo que sea.
– Déjame a mí
Siempre terminan solucionando los problemas de la mejor y más rápida forma posible.
Saber qué hacer y cómo hacerlo cuando se produce una crisis en una empresa o negocio es una de las tareas más complicadas y esenciales que hay. Desde el boom de las redes sociales, cada vez es más importante tener bien planteado un protocolo de crisis que dé solución al problema eficazmente y con la mayor inmediatez. Consejo, llama a una madre.
Felicidades a todas las madres (con una mención especial a nuestras súper mamás, Anabel y Vero).